domingo, 13 de junio de 2010

"Greater New York": talento emergente cada cinco años

Es un panorama de los artistas nuevos y poco conocidos que trabajan en esa ciudad. La muestra se creó hace diez años y acaba de inagurarse la edición 2010.

Por: Roberta Smith para The New York Times y Clarín

PANORAMA. La muestra propone un recorrido por los creadores neoyorquinos más importantes e insoslayables.

AnteriorSiguiente

1 de 2

"Greater New York", un panorama de los artistas emergentes y poco conocidos que trabajan en la ciudad de Nueva York se creó en 2000 y se organiza cada cinco años.

Más que otras versiones, la actual, que se apropió del MoMA P.S. 1 en Long Island, Queens, es un bienvenido sacudón al mundo del arte neoyorquino en lo que se refiere a propósito, ambición y rango de cosas en las que hace pensar.

Diseminando la obra de 68 artistas en un edificio enorme, "Greater New York" transmite la sensación de que es maravilloso ser joven y hacer arte en esta ciudad. En muchos casos, sin embargo, "Greater New York" es como un espejismo, donde se retienen las pruebas contundentes. Hay obra sólida, pero no en cantidad suficiente.

La muestra fue organizada por Klaus Biesenbach, director de MoMA P.S. 1 y principal curador general en su institución matriz, el Museo de Arte Moderno; Connie Butler, curadora principal de dibujos en el Modern; y Neville Wakefield, asesora senior de curaduría del MOMA.

Hace un guiño a todas las referencias del momento: arte colectivo, lo efímero, participación del público, temática política, arte es vida, arte es documental, arte como interacción social.

La principal misión de "Greater New York" parece ser probar de adentro hacia fuera que no sólo la performance es el medio artístico dominante en nuestro tiempo sino que también hay aspectos de ésta que se han infiltrado en otras formas, entre las que se cuenta la exposición de arte propiamente dicha.

Dominada por videos, mezclados con performances y con otros trabajos en proceso, "Greater New York" tiene algo de estructura organizativa viral, mutante. Algunos de los artistas seleccionados han invitado a colaboradores para que trabajen con ellos, o recomendaron a otros para el programa de performances de la muestra.

El programa menciona lecturas de poesía, artistas en residencia, performances en colaboración, grupos de encuentro, estudios abiertos y ensayos, y un "happening experimental duracional". Ya suena un poco a campamento de verano. Sumándose a toda esta actividad, cinco curadores independientes organizarán, cada uno por su lado, una muestra dentro de la muestra de cinco semanas durante los cuatro meses y medio que se prolongará "Greater New York".

Los curadores también, quizá perezosamente, cooptaron algunas muestras individuales recientes en galerías, alejando a "Greater New York" de su tradición de descubrir artistas. En este caso, no obstante, las fotos anti-Cindy Sherman de K8 Hardy y la instalación de dibujo y pintura para recorrer de Franklin Evans constituyen puntos sobresalientes, al igual que los trabajos de Tommy Hartung y Leidy Churchman.

Es poco frecuente ver una muestra que ponga semejante fe en artistas ­ o que canalice su generosidad, imaginación, pasión y habilidades para formar redes de manera tan diestra ­ prestando a la vez tan poca atención a las obras de arte concretas.

Hay demasiadas salas que prácticamente no inducen a detenerse y mirar. Lo más triste de ver es la pintura, que en su mayor parte es realmente "pintura", abordada con ironía y empujada hacia la escultura, el video y la performance. Churchman es el único pintor que sale airoso.

Pasa con soltura de dibujos homoeróticos falsamente ingenuos en madera a videos pintura-performanceexorcismo o esculturas sobre mesa sin perder en lo más mínimo su concentración. Algunas obras en proceso están demasiado atadas a la agotada fórmula de la taza de té forrada en piel: combinar objetos o materiales que en general no se encuentran juntos y esperar a que la gente exprese asombro.

David Brooks reunió de manera honesta un trozo representativo de vida vegetal de bosque tropical lluvioso y lo bañó en cemento­ algo así como una síntesis de Robert Smithson en espacio cerrado y un paisaje de George Segal ­en protesta por la destrucción de la naturaleza por parte de la industria. Las plantas enfundadas morirán y se descompondrán, colapsando en una suerte de happening en cámara lenta. Nada de esto genera demasiada competencia con el video, la performance y la fotografía. Algunos de los trabajos en estos medios son relativamente elaborados, aunque realizados con una orientación de hágalo usted mismo.

El video-performance de 18 minutos de Deville Cohen, "Grayscale (A Video in Three Acts)", sin duda una parodia de Matthew Barney, se centra en una troupe de travestis con tacones improvisados que encuentran usos inesperados para insumos de oficina y una sorprendente inspiración en los elementos básicos de un lavado de automóviles.

"Ascent of Man" de Hartung, es un tributo a la famosa serie de la BBC, contiene una poesía maravillosa y utiliza juegos improvisados sobre la mesa con resultados alternadamente grandiosos y cómicos. Pero la mayoría de las mejores iniciativas en estos medios son más elementales, comparten un impulso por revelar procesos básicos: la vida vivida o el arte en etapa de realización, y la vulnerabilidad que ambos requieren.

Uno de los ejemplos más intensos y perturbadores es la obra de Leigh Ledare, que utiliza fotografía y video para documentar su relación altamente erotizada con su madre y el efecto que tuvo en su propia sexualidad. En otros casos, la estructura es dictada por la realidad. "Unbranded: Reflections in Black by Corporate America 1968-2008" de Hank Willis Thoas presenta 41 pares de fotos, concisamente etiquetadas, que revelan otra clase de páramo: la actuación de la negritud en la publicidad en las últimas cuatro décadas.

En una de las piezas más peripatéticas de la muestra, el artista de video-performance Ryan McNamara, que tiene cuerpo de bailarín y sentido musical pero ningún entrenamiento, usa las salas como estudio de baile. Haciendo rodar una barra móvil y un espejo, recibe instrucciones de profesionales de la danza de todo tipo (clásica, moderna, exótica) o simplemente hace elongación y practica. De una u otra manera, los visitantes pueden observar o integrarse.

No hay comentarios:

Publicar un comentario